La Sociedad que Queremos

En la actualidad la sociedad chilena experimenta un proceso de cambios continuos que han contribuido a tranformaciones en las pautas de comportamiento social, político, económico y cultural. Por esta razón nosotros/as, la ciudadanía, tenemos un rol fundamental en la construcción de una nueva sociedad, en la cuál se busca como objetivo el desarrollo de la sociedad en todo su esplendor. Para esto es importante que nos preguntemos ¿cuál es el tipo de sociedad en la que queremos vivir? ¿qué debemos hacer para alcanzarla? y ¿qué rol jugamos cada uno en este proceso de transformación constante hacia una mejor sociedad? Respuestas hay muchas, y acá sólo podremos encontrar algunas luces del camino que queremos tomar.

domingo, 4 de octubre de 2009

¿El boom de la publicidad del gobierno o una comunicación necesaria?



En El Mercurio del día Domingo 4 de Octubre me he encontrado con un artículo que se titula “El boom de la publicidad del Gobierno”. Sólo con leer el título me imagino que se trata de una versión negativa acerca de la comunicación necesaria en materia de políticas públicas. Continué leyendo, pensando que podía estar en un error y que quizás no era como yo lo pensaba. Sin embargo en el andar del artículo me doy cuenta que la forma de plantear el tema es de manera negativa, y me pregunto ¿Si estas personas (las creadoras de este artículo) tendrán, siquiera, alguna idea de lo que significa diseñar políticas públicas o si tienen conocimientos acerca de lo que conlleva el hecho de implementarlas o ejecutar dichas políticas?

Me respondo de la siguiente manera: al leer el artículo tengo dos opiniones, la primera plantea que las periodístas que escribieron el artículo, tienen los datos y la información de los hechos. Sin embargo carecen de todo tipo de conocimientos necesarios respecto de lo que significan las políticas públicas y de su estrecha y necesaria relación con los utilizar los medios de comunicación. La verdad es que no pretendo ponerme en una posición pro-gobierno, ni menos dejar de ser crítica cuando sea necesario. Sin embargo me parece que la descalificación gratuita y, claramente, sin fundamentos no puede dejarse pasar. Y en este caso se da algo de estas características, que insentivan la creación de este artículo de opinión.

Como Cientista Político, y como muchos colegas de las Ciencias Sociales que conocen del tema de las políticas públicas, sabemos que el desarrollo de las políticas no es un proceso fácil, rápido e instantáneo, y también sabemos que en su desarrollo confluyen diversos actores que permiten llevarla a cabo. Uno de los actores que es fundamental para la etapa de implementación de una política pública son los medios de comunicación, que en su calidad de informantes, permiten difundir las políticas a la ciudadanía.
Pensando en una lógica de respuesta a demandas ciudadanas, las políticas públicas tienen la necesidad de mostrarse a los beneficiarios (ciudadanos) para que estos puedan ejercer su derecho en caso de poder hacerlo. Y no pretendo desconocer, con esto, que las políticas también tienen un fin electoral que permiten la permanencia en el poder, pero esto bajo una lógica de campaña permanente, que si bien está presente, no es la prioridad de un gobierno a la hora del diseo de las políticas. Me parece que antes de esto una política pública es una respuesta a una demanda ciudadana y, por lo tanto, como respuesta a una demanda ciudadana, la ciudadanía tiene el deber de conocer en que consiste esa respuesta. Y para poder conocerla, es necesario que la ciudadanía se informe a través de los medios de comunicación que se utilizan actualmente, y si esto significa hacer publicidad masiva, entonces es necesario hacerlo para alcanzar el objetivo.

Cuando me encuentro con un artículo como el que aparece en El Mercurio de este domingo, la verdad es que sólo puedo ratificar el sesgo ideológico que existe detrás de todo esto. Y es que, aunque reconozco la existencia de buenos artículos en este diario nacional, este en particular deja mucho que desear por la falta NO de objetividad (es sabido que cuando uno escribe siempre está escribiendo desde alguna posición definidad), sino más bien por una falta de información y de conocimientos acerca del tema que se está tratando.

Bernardita Aguirre y Pamela Aravena, se hacen cargo de lo que están escribiendo, entregan cifras que de verdad son muy importantes, nos informan acerca de los gastos en publicidad utilizados por el gobierno para promover la Red Protege, como uno de los ejemplos utilizados. Los gastos utilizados para el Transantiagom, Plan auge, etc.. La pregunta es ¿Qué tiene de malo que el gobierno gaste en publicidad para la promoción de sus políticas públicas? que por lo demás son para la ciudadanía. Si no lo hicieran, entonces ¿Cómo los ciudadanos nos enteraríamos de los beneficios sociales? ¿Cómo podríamos ejercer nuestros derechos si nos los conocemos? Y en caso de que se considere como una gasto excesivo, me pregunto ¿Cómo lo harían aquellas personas para promover políticas a un país completo, y que logre llegar a cada uno de los rincones de nuestro país? ¿Cómo harían para informar a la ciudadanía, si no es utilizando la publicidad y los medios de comunicación?

Me parece poco responsable escribir un artículo que quiera mostrar una realidad como si fuera negativa, cuando en la práctica misma de las políticas públicas es algo necesario. Es recomendable que al momento de querer demostrar algo vinculado con las políticas públicas y la comunicación, primero necesitan conocer el tema en profundidad o dejar en claro que al menos conocen en qué consisten las políticas públicas, sus etapas y los elementos necesarios que la componen. En caso de no tener ese conocimiento, entonces hay dos opciones como profesional: o me abstengo de escribir algo de este tipo, porque sería poco responsable de mi parte, o me informo de la manera más completa posible antes de hacerlo. Pero es inaceptable presentar algo que se muestre de la manera en que se mostró en este artículo, por lo menos para mi lo es.